Por Javi Alfonso y Majo Giménez
Esta semana, después de muchos meses de preparación y gestión junto al área de cultura del Ayuntamiento de Catarroja, han dado comienzo los talleres de teatro municipal en esta localidad a cargo de Mos Teatre.
Pasadas las presentaciones y primeras clases de cada grupo, nos quedan muchas emociones y una reflexión: no importa que tengan cinco, nueve, catorce o cincuenta y nueve años, sigue fascinándonos la entrega de cada persona por expresarse, por manifestarse artísticamente. Y es que, en estos talleres y por nuestra experiencia, cada persona nos demuestra que tiene mucho que decir.
Con los más pequeños, han empezado los juegos, la estimulación para despertar su creatividad e imaginación y mucha, mucha emoción. Los adolescentes por su parte, se muestran más sobrios, pero suben al escenario y les posee un hambre insaciable de demostrar de qué son capaces y sacar todo el arte que llevan dentro, que no es poco.
Como cabía esperar, el grupo de los adultos, desde los escasos veintipocos años de algunos a los casi sesenta de otros, nos han dejado con la boca abierta. Empiezan mostrando un poco de vergüenza, pero en cuanto se suben al escenario y ejecutan los primeros ejercicios, esas herramientas, ése material de serie que tanto nos fascina de los que debutan en el medio escénico, empiezan a brillar y a mostrar una frescura que podría mantener pegado a la butaca al espectador más exigente.
Ahora estamos en el punto de partida, queda disfrutar del proceso en cada grupo y de ir levantando este proyecto con el esfuerzo de todos.
I didn’t know that.